¿Videntes que no cobran dinero? ¡Alerta! puede ser un gancho
¿Videntes que no cobran dinero? Lo barato sale caro, y cuando se trata de videntes gratis, además, puede ser un camino lleno de decepciones. ¿Para qué negarlo? Ponemos todas nuestras esperanzas en alguien que nos diga que el camino va a mejorar, que quien nos gusta se va a enamorar de nosotros, o que ¡esta vez sí!, muy pronto conseguiremos el trabajo añorado.
El uso de videntes aumenta en tiempos de crisis, que es justo cuando la gente tiene menos recursos y puede ser tentada por un vidente que -según él- no cobra dinero. Pero es que en las crisis es cuando las personas buscan tener mayores certezas, quieren evitar riesgos y creen que consultando a un vidente podrá mejorar su situación.
¿Videntes que no cobran dinero? nosotros cobramos pero damos mucha seguridad pagos seguros.
Un vidente que no cobra es la mejor forma de engancharnos
Primero ofrecen la consulta gratuita en la que nos dicen unas cuantas cosas que coinciden con nuestra vida. Si nos detenemos a pensar, seguro que esas cosas coinciden con la vida de cualquiera. No obstante, así nos entusiasman, agradándonos y haciéndonos sentir escuchados, y entonces repetimos pero pagando.
Usan expresiones genéricas para mantener la atención de las víctimas en cuentos y vueltas interminables que les permiten hacer tiempo sin decir nada para acumular minutos de consulta y cobrar más. Si es por Internet, depende de la complejidad del sistema de pago, pero siempre terminan cobrando mucho tras una oferta de gratuidad.
Es necesario tener cuidado con los servicios extras. Esos que te ofrecen cuando ya te han captado, cuando ya te están leyendo las cartas, las runas o las borras del café.
Estos pueden ser de distinto tipo: te piden que compres un amuleto a un precio desproporcionado o, en el peor de los casos, dinero para el sacrificio de algún animal que después no compran. Todo lo extraordinario que se salga de la lectura clásica, te lo querrán cobrar a precio de oro. Por eso se puede decir que no hay vidente gratis.
Tienes que saber que los verdaderos videntes son realmente escasos, y la mayoría de ellos atienden personalmente. Con un buen vidente notarás la diferencia, por la forma en que te habla y se conecta contigo.
Un vidente gratis te puede salir muy caro
Formalmente, la videncia en países como España es un trabajo profesional más, que debe estar registrado legalmente, que lo puede desempeñar cualquiera y que paga impuestos de ley. En tiempos de crisis, los videntes, medium y lectores de cartas de cualquier tipo se multiplican, y dar con profesionales serios se complica.
En algunos casos, la estafa se presenta camuflada por una falsa fama que hace de carta de presentación y justifica cualquier tarifa. Este fue el caso de una conocida vidente española,Llegó a tener un programa de televisión que le sirvió como escudo para hacer cosas como estafar a una anciana 300.000 euros en dos meses. La anciana la denunció cuando estaba ya sin dinero y veía que los rituales que le pedía hacer no funcionaban.
Y no es el único caso. También está el de Anastasio , el dueño de un Tarot , negocio que tenia junto a su esposa y su suegra por teléfono desde un pueblo de 520 habitantes en Cuenca. Este hombre se vendía como chamán. Había hecho de la videncia telefónica una fábrica de dinero tal que podía permitirse viajes a Disneylandia, varias compras de coches Mercedes y apartamentos en la playa. En su caso, también ofició bodas a extranjeros poco informados. Afortunadamente, a principios de 2017 ha sido enviado a la cárcel durante 3 años.
El profesor Kunate fue un supuesto vidente que cobraba por sacrificar cocodrilos en el Nilo, lo cual en términos de creencia no es ilegal, aunque la especie está protegida. Los sacrificios nunca se llevaban a cabo. Él se ofertaba como un auténtico vidente africano, pero se dio a la fuga cuando debía enfrentarse a su cita con la justicia. Seguramente, se le reveló un futuro poco prometedor.
Un negocio difícil de desmantelar
La estafa por videncia es difícil de probar. Siendo un servicio por el que se paga voluntariamente y en el que se involucran la fe y las creencias, solo si se demuestra mala intención y abuso se consigue que algún juez considere el caso. Y todo puede haber empezado con un vidente que no te cobró.
Ser falso vidente, además, no parece tan complicado. Un reportaje de la revista Vice relata cómo una persona que no sabía nada del asunto más allá de conocer el significado de las cartas, tras un par de llamadas telefónicas en las que le pusieron a prueba, terminó trabajando una temporada como vidente hasta que se cansó de sacarle dinero a la gente.
¿Videntes que no cobran dinero? alerta….
A un verdadero vidente también lo reconoces porque no se considera a sí mismo infalible pero, sobre todo, porque no se cree indispensable, que es una gran diferencia con quiénes te quieren captar solo para exprimirte la cartera.
Es importante destacar en este punto que hay mucha gente dedicada a la videncia que lo hace desde la buena fe y la honradez. Los chamanes y videntes auténticos saben que sus poderes son una bendición y, por respeto a tal iluminación, son incapaces de manchar su reputación y alterar sus capacidades estafando a otras personas.
En definitiva, que un vidente no te cobre no significa que su servicio no te vaya a costar, no solo en dinero, sino en tiempo y en decepciones. Si deseas ponerte en manos de buenos videntes, lo mejor es que acudas a personas con buena reputación y que no hagan ostentación de sus poderes.
¿Videntes que no cobran dinero? yo lo pensaría mejor y me decantaría por pagos de tarot por paypal
Deja un comentario